Mendiga
De todas las adoraciones…, el desastre es enorme.
Y no coincidan, no interrumpan la conexión.
Así para siempre, que incluso en la lápida,
mirando hacia abajo, sin atreverme a estar contigo,
aceptaré una hostilidad claramente expresada,
pero no amenazadoramente elevada.
Con los vientos de la bahía, al atardecer,
me quedo como una mendiga expulsada en tu puerta.
Pero esto es solo una sonrisa, no una maldición.
La cruz es más noble que el hierro fundido de la cruz.
La ironía es una ocupación para los elegidos.
La vaga finalidad del final.