Ya sin palabras

¿Y dime quién, tan fuerte e inteligente?,¿Y quién quitó mi voz de la garganta?.¡Ay cuánto es digno amor tan contundente!,y.

Elegía por la niña callada II

¡Oh! Si mis días fluyeranpaz y el olvido en la mente,libre del ruido de gente,lejos de angustia ya fueran. Cuando.

Borro el recuerdo de mi frente

¡Adiós! ¡Adiós! Desde la frente borraré un recuerdo:un jardín suave y húmedo,profundizado en la belleza,como en una ocupación importante. ¡Adiós!.

En una casa de vacaciones vacía

Caer desmayada como una fruta dormida,en el silencio de las ramas y lechos,no ser consciente de la carne viva,de su.