Nunca las azucenas serán suficientes
Ya quiero ser la novia hermosa, pido.
Rizada, bajo el blanco tul colgante,
vestida en blanco, Vesta para amante,
tan asombrosamente introvertido.
Y para que las manos se entremezclen
en los anillos de hielo congelante,
así cristales converjan en descargas
por la salud de los jóvenes.
Para que todos estén de acuerdo conmigo,
hijos profetizados…
Hacer amigos con regalos
tímidos en la puerta…
Camisas en celofán,
platos, encajes.
Para besar en la mejilla,
hasta que sea esposa…
Mi vestido blanco
lloró con vino,
feliz y pobre.
Estoy sentada a la mesa.
Aterrador y tentador
lo que se avecina.
Mi mami está llorando…
mamá, mamá, espera.
…Mi traje de boyardo
tirado en la cama.
Es bueno tener miedo
al besarte.
Se ponen las sillas, ruidosas
junto a la pared…
Algo más lejos se convertirá
contigo y conmigo?…