No te separes de tus seres queridos

No te separes de tus seres queridos.
Crece en ellos con toda tu sangre.
Y decir adiós es cada vez para siempre.
Cuando te vas por un momento.

Mientras viva, estaré contigo.
Alma y sangre son inseparables.
El amor y la muerte siempre están juntos.
Lo llevarás contigo a todas partes.
Llevarás a tu ser amado contigo.
Mi tierra natal, mi dulce hogar…

¿Y si no tengo nada con qué esconderme
de una pena incurable?
¿Y si no tengo nada para refugiarme
del frío y la oscuridad?
Después de la despedida habrá una reunión.
No me olvides, mi amor.
Los dos volveremos, tú y yo.

Pero si te hundes en lo desconocido,
breve luz del día.
Más, si te hundes en lo incierto,
detrás del cinturón de estrellas,
en el humo lechoso,
rezaré por ti,
para que no olvides el camino terrenal,
rezaré por ti,
para que regreses ileso.

No te separes de tus seres queridos
Crece en ellos con toda tu sangre
Y decir adiós sea cada vez para siempre
Cuando te vas por un momento